Has logrado adquirir tu coche eléctrico y la emisión de Co2 dejó de ser una preocupación para ti, pero ahora surge una nueva inquietud: La autonomía de tu vehículo.
Para no depender únicamente de los escasos puntos de acceso público a nivel nacional, una excelente opción es instalar tu propio equipo, por eso te invitamos a indagar sobre las principales características de los puntos de recarga para vehículos eléctricos, a fin de que elijas bien.
7 características de los puntos de recarga para vehículos
Si como conductor de un coche eléctrico necesitas mayor autonomía, probablemente te estás preguntando qué estación de carga es la más adecuada, cómo funciona la carga o cuáles son las características de los puntos de recarga de vehículos.
He aquí un poco de luz al respecto.
1.Eficiencia de carga
La velocidad de carga no siempre es igual, pues se adapta a diferentes situaciones.
Hay tres tipos principales de carga: la rápida, la semirápida y la convencional.
Carga rápida
Como es de suponer, estos cargadores son la forma más rápida de recargar un coche eléctrico, pues suministran corriente continua o alterna de alta potencia a fin de recargar el automóvil lo más rápido posible.
Según el modelo del vehículo, el coche puede estar cargado al 80 % en tan solo 20 minutos, aunque si el vehículo es nuevo, tardaría un poco más; alrededor de 1 hora en un punto de carga rápida estándar de 50 kW.
Este tipo de recarga es la que sueles encontrar en los equipos de recarga urbanos.
Carga semirápida
Los cargadores semirápidos
suelen tener una potencia nominal de 7 kW a 22 kW, y el tiempo de carga varía según la velocidad de la unidad y el vehículo.
Por ejemplo, un cargador de 7 kW recargará un coche eléctrico compatible con una batería de 40 kW en 4 a 6 horas; mientras que con un cargador de 22 kW, la recarga se tomaría entre 1 a 2 horas.
Este tipo de recarga es la que sueles encontrar tanto en equipos de carga urbana como en domicilios.
Carga convencional o lenta
Una carga completa en uno de estos equipos de carga convencional generalmente demora entre 6 a 12 horas; un tipo de recarga bastante utilizada por los propietarios de vehículos eléctricos, a fin de cargar en casa durante la noche.
2. Compatibilidad con el enchufe del cable de carga
Existen diferentes estándares de carga que se utilizan en el mercado de vehículos eléctricos: Carga de CC (corriente continua) para cargas rápidas, y CA (corriente alternativa) para recargas con capacidades más bajas; y según el coche que tengas, podrás cargarlo con uno u otro.
En nuestra región, por ejemplo, se ha estandarizado el uso del conector Mennekes para cargas en CA y del CCS para cargas en CC.
3. Protección de daños
Los puntos de recarga son construidos con protección contra el viento y la intemperie, e igualmente con protección contra el vandalismo.
Igualmente, el equipo suele incluir control de acceso y dos tomas tipo 2, a fin de que dos coches puedan cargar al mismo tiempo. Dependiendo del proveedor, los cables tienen una longitud de entre 4 y 7,5 metros, disponibles en diseño liso o en espiral.
4. Punto de uso
Una estación de recarga puede instalarse en diferentes entornos, tanto en espacios públicos (calles, autopistas, centros comerciales, supermercados), como en espacios semipúblicos (estacionamientos) o terrenos privados (hogar, empresa).
5. Supervisión
Dependiendo de tu proveedor, la estación de recarga se puede monitorizar, medir y controlar a través de una aplicación de teléfono inteligente o interfaz web, a fin de regular de forma remota el proceso de carga.
Por ejemplo, el proceso de carga se puede pausar en la aplicación o se puede mostrar la potencia de carga máxima.
6. Control de acceso
Otra medida de control con la que cuentan los puntos de recarga para vehículos eléctricos, es el control de acceso, la cual se puede usar para que la estación sea accesible sólo para determinados usuarios.
Lo más común es que este control de acceso se trate de un interruptor de llave integrado, que puede encender y apagar la estación con una llave, o una tarjeta que permite desbloquearla.
Lo interesante acerca del interruptor de llave integrado, es que más personas pueden usar el punto de recarga y se puede rastrear la cantidad de electricidad que cada uno ha usado.
7. Carga de exceso de energía fotovoltaica
Algunas estaciones de recarga pueden cargar directamente con la energía solar producida directamente desde el techo; es decir, ese exceso de energía que no se utiliza en el hogar, puede ser utilizado para cargar el coche eléctrico y estarías contribuyendo con el ambiente al utilizar energía 100 % limpia.
¿Listo para encontrar un punto de recarga con estas características?