El ahorro de energía es actualmente el tema del que se habla en todas partes, y con razón, ya que, cuando ahorras energía contribuyes al uso sostenible de los recursos.
Actualmente, en algunos hogares y empresas. no se es consciente de la gran cantidad de dinero que se desembolsa para el pago mensual de la electricidad.
Y la buena noticia, es que pueden reducir los gastos con solo seguir estos 10 consejos para ahorrar luz en tu oficina.
¡Veamos!
10 consejos para ahorrar luz en la oficina
Si pones en práctica estos 10 pequeños cambios para ahorrar luz en la oficina, notarás la diferencia sobre todo en tu bolsillo.
¡Toma nota!
1. Apagar las luces
Hay espacios que sí o sí dependen del alumbrado artificial, especialmente en los meses más fríos y oscuros.
Afortunadamente, se puede alumbrar y minimizar los costos de iluminación al mismo tiempo, utilizando bombillas LED de bajo consumo en lugar de incandescentes estándar.
Y es que, las luces LED utilizan un 80% menos energía que las bombillas estándar y, además, duran mucho más.
2. Olvídate del papel
Tener en tu oficina una regla fija de “no usar papel”, te ahorrará la energía que habrías gastado imprimiendo hojas para reuniones o notas.
En ese caso, para sustituir el papel, te sugerimos agregar a una unidad compartida, cualquier documento que desees distribuir con otras personas, en lugar de imprimirlo o simplemente envía un correo.
De esta manera, reducirás el consumo energético, ya que no será necesario utilizar la impresora.
3. Ajustar el termostato
Apaga los sistemas de aire acondicionado/calefacción durante períodos de completa inactividad y en áreas desocupadas.
Además, no olvides cerrar puertas y ventanas cuando la calefacción o el aire acondicionado estén encendidos.
Es importante que bajes la temperatura de calefacción en 1 grado, y aumentes la temperatura del sistema de aire acondicionado, esto se traducirá en aproximadamente un 6% de ahorro de energía.
4. Apaga tu equipo de oficina
Al igual que las luces, asegúrate de que todas las computadoras, microondas, escáner y otros equipos, estén apagados por la noche y durante los fines de semana.
Recuerda que estos dispositivos electrónicos continúan consumiendo energía, incluso si siguen enchufados, a esto se le denomina consumo de energía en espera.
5. Opta por computadoras portátiles
Las computadoras portátiles suelen consumir menos energía en comparación con las computadoras de escritorio, así que ten esto en cuenta.
Al comprar equipos para tu oficina, opta por computadoras portátiles siempre que sea posible.
El tamaño del monitor también contribuye a la cantidad de energía consumida, haz la selección correcta y mantén el tamaño de la pantalla a un nivel razonable, los monitores más pequeños consumen menos.
6. Pausa para tu almuerzo… y también para tu equipo
Cuando llega la hora del almuerzo, también puedes contribuir al ahorro de energía.
Durante la pausa del almuerzo nadie necesita la luz de su escritorio encendida ni la computadora en la que trabaja, por lo tanto, ambos pueden desconectarse durante la hora de la comida.
7. No utilices protectores de pantalla
Si, las pequeñas cosas también cuentan y esto incluye claramente los salvapantallas.
Los dispositivos modernos ya no necesitan un protector de pantalla, en ese caso la secuencia de imágenes solo tienen un efecto óptico.
Si deseas ahorrar energía en la oficina, vale la pena apagar estos protectores en todos los equipos, y también puedes configurar la pantalla para que cambie al modo de espera después de un cierto tiempo en el que no se esté utilizando.
8. Realiza auditoría energética
Es bueno verificar el consumo de energía de tu lugar de trabajo y evaluar su eficiencia eléctrica general mediante auditorías energéticas.
De esta manera, sabrás si estás consumiendo demasiada energía o si vas por buen camino, usando solo la necesaria para mantener las operaciones comerciales.
9. Actualice tus electrodomésticos
Siempre debes verificar las calificaciones de eficiencia de tus electrodomésticos, ya que si no cumplen con los estándares, podrías estar usando mucha más energía de la necesaria.
El refrigerador, por ejemplo, está siempre encendido, por lo que la actualización a un modelo nuevo y más eficiente en energía, puede tener un impacto significativo en la cantidad que cuesta operar cada año.
10. Realiza un mantenimiento regular
Limpia o cambia los filtros de tu sistema de calefacción, ventilación y aires acondicionados, con frecuencia una vez al mes, si tu negocio está ubicado enun área industrial donde el aire está particularmente contaminado.
Los filtros sucios hacen que el equipo trabaje demasiado para mantenerse caliente o frío, en cambio, los equipos limpios mejoran el rendimiento y las condiciones de trabajo.
Si ahorras energía, reduces tu factura, ayudas al medio ambiente y a tu negocio